La atmósfera terrestre es la capa externa de la tierra con unos diez mil kilómetros de extensión se encuentra constituida principalmente por gases aunque contiene una cantidad no tan considerable de pequeñas partículas sólidas y líquidas, es por esto que se dice que es la parte gaseosa de la tierra.
Cumple una función esencial para la vida terrestre debido a que es la encargada de permitir la entrada y salida de la energía a la corteza terrestre, controlando especialmente la cantidad de energía calórica proveniente del sol.
La atmósfera contiene una serie de capas que se estructuran de forma horizontal bien definidas, a continuación detallaremos cada una de éstas.
Troposfera
La primera capa de la tierra es la tropósfera es la más cercana a la tierra y sin su existencia la vida en la tierra sería imposible. En esta se producen los fenómenos climáticos y los cambios de temperatura que forman cada una de las estaciones del año. Posee entre 10 y 15 kilómetros de espesor, su tamaño varía en las diferentes regiones siendo bastante más delgada en los polos.
Es aquí donde se ubican la mayor cantidad de vapor de agua y oxígeno de la atmósfera. Un detalle que la hace especialmente singular es que en su capa más superficial posee una parte denominada por los científicos la tropopausa, es por esta misma que actúa como una capa aislante permitiendo que el vapor de agua existente no se eleve más alto y la tierra así no pierde toda el agua.
Estratosfera
También denominada ozonosfera, se encuentra por encima de la troposfera y por debajo de la mesosfera. Al igual que la capa detallada anteriormente su extensión varía de acuerdo a las diferentes regiones, siendo en los polos de 7 kilómetros aproximadamente y en el ecuador de 17 kilómetros aproximadamente. Su extensión llega hasta los 45 kilómetros de altura.
A medida que se va elevando la altura la temperatura es mayor partiendo desde los -50ºC pudiendo alcanzar los 15ºC aproximadamente, este último dato varía de acuerdo a los autores. La principal función que desempeña es la absorción de la energía electromagnética producida por los rayos ultravioletas, gracias a la gran concentración de ozono existente.
Un dato por demás importante es que solo se presentan vientos en forma horizontal, que permiten la rápida distribución por la tierra de las sustancias intervinientes dentro de la capa de ozono.
Mesosfera
Esta capa se ubica entre la estratosfera y la termosfera. Se caracteriza por ser la capa más fría de la atmósfera, su temperatura va descendiendo, pudiendo alcanzar de esta forma los -80ºC. En ella se producen grandes turbulencias y ondas atmosféricas.
Termosfera
Denominada Por algunos también ionosfera, es la capa que se encuentra ubicada entre la mesosfera y la exosfera. Su extensión se sitúa desde los 100 kilómetros hasta los 800 kilómetros aproximadamente, siendo al igual que en los casos anteriores variable de acuerdo con la región.
Su principal función radica en la ionización a partir de la absorción de los rayos gamma y rayos x provenientes del sol, aunque también sirve de barrera logrando frenar algunos meteoritos, que pueden ser apreciados desde la tierra como estrellas fugaces. Las partículas en esta capa se encuentran muy separadas y la concentración de gases es muy baja.
Exósfera
Esta es la última capa de la atmósfera, se encuentra por encima de la termósfera. Su composición se va dispersando con la altura teniendo en sus últimos kilómetros una estructura que se asemeja a la del espacio exterior. Su densidad es la menos consistente de todas las capas de la atmósfera y se extiende desde los 700 kilómetros aproximadamente.
La temperatura no ofrece variación alguna y hay una gran concentración de polvo espacial, en este lugar los gases si se pueden escapar al exterior. Su principal función es la ionización a partir de las materias plasmáticas que permiten que la gravedad sea mayor.
El origen de la atmósfera
Si bien no se sabe a ciencia cierta cuántos años hace que se formó esta capa que permite la vida en la tierra, estudios sobre el tema demuestran que aproximadamente la atmósfera nace como tal hace unos 4800 millones de años. Este proceso de formación llevó consigo una serie de etapas según las diferentes teorías.
En un primer estadio se producen una serie de explosiones volcánicas que tienen lugar gracias a la evolución de los procesos de formación geológica y que permiten la expulsión de ciertos gases que se encontraban en el interior de la corteza terrestre al exterior, conjuntamente con una gran cantidad de vapor de agua, nitrógeno y dióxido de azufre. Como consecuencia de la expulsión de estos gases además se libera una gran cantidad de dióxido de carbono. En conjunto estas erupciones volcánicas permiten la formación de islas, que más tarde pasarían a ser parte de los continentes que conocemos actualmente.
Seguidamente comienza se cree un segundo estadio que permite la formación de océanos a partir de la gran liberación de vapor de agua que condensa y cae en la superficie terrestre. Las grandes cantidades de dióxido de carbono reaccionan en contacto con las rocas de la superficie y una gran cantidad de estas últimas se disuelven en el agua condensada, formando lo que hoy conocemos como el agua salada de los océanos y mares.
Más tarde cuando ya se sucedieron unos 1200 años más aproximadamente tiene inicio la tercera etapa de formación, es en este momento donde surge la vida en la tierra, son las bacterias capaces de alimentarse a partir de la fotosíntesis las que aparecen primeramente produciendo el oxígeno que más tarde permitiría la existencia de diferentes especies animales y vegetales en la tierra y en los océanos.
Cuando hubo suficiente cantidad de oxígeno algunos de los grandes organismos existentes hasta el momento evolucionan siendo entonces los predecesores de algunos de los animales que conocemos hoy en día.
Finalmente luego de muchos años termina la formación de la atmósfera que permite la protección de la vida terrestre y contiene los gases que permiten la vida. Aunque no los podemos ver ni tocar gran cantidad de gases atmosféricos se encuentran en constante movimiento y son arrastrados por vientos y otras inclemencias climáticas.